La encuesta fue realizada a más de 1100 personas a través de las redes sociales, con el objetivo de recabar información sobre las características y las consecuencias de este tipo de situaciones en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires y suplir la falta de datos oficiales e investigaciones disponibles. Además, se busca visibilizar el problema y contribuir a mejorar las estrategias de abordaje y prevención.
Los resultados encontrados muestran que, en su forma digital, las situaciones de mayor vulneración se concentran en la intersección de las variables de género, edad y orientación sexual: las mujeres jóvenes y diversidades sexuales son las más afectadas.
Por otra parte, se trata de una problemática muy naturalizada y anclada en el anonimato propio del funcionamiento de las redes sociales y la tendencia de las personas que atraviesan este tipo de situaciones a no accionar en instancias formales o hacer público lo sufrido.
Principales hallazgos:
-En el último año, 6 de cada 10 de las adolescentes y mujeres encuestadas experimentaron situaciones de violencia de género digital. Del mismo modo, integrantes del colectivo LGBT+ se vieron afectados/as en un 52,5% de los casos.
-4 de cada 10 recibieron material con contenido sexual sin haberlo pedido.
-1 de cada 5 sufrió burlas o descalificaciones por su género, identidad de género u orientación sexual.
-Más del 80% coincide en que la virtualidad hace que Internet y las redes sociales sean ámbitos de mayor agresividad.
-Las redes sociales facilitan el anonimato de los agresores. El 73% indicó no saber quién fue el responsable. Cuando se logra identificar al agresor, muy frecuentemente es un varón. Las mujeres agresoras no superan el 13% de los casos.
-Solo el 36% informa a la plataforma donde ocurrió la agresión y menos del 10% busca ayuda formal. La mayoría no comparte lo sucedido, ni públicamente ni con alguien de su confianza. Esto revela una serie de obstáculos: la naturalización o minimización de la violencia, el desconocimiento de los canales para realizar denuncias, la desconfianza en algunas instituciones y el temor a la revictimización.
El informe completo con el resto de los hallazgos del estudio estará disponible para su descarga la próxima semana en la página web y redes sociales de la Defensoría.