Ese día, miles de familias llegan al cementerio con comidas y diferentes ofrendas para homenajear y reencontrarse con sus muertos.
Se trata de una tradicional ceremonia que comienza el 1 de noviembre en las casas y continúa al día siguiente en el cementerio.
La Defensoría del Pueblo participó de las reuniones previas con representantes de las comunidades y las áreas del gobierno de la Ciudad responsables del operativo desplegado para la fecha, y se hizo presente desde el inicio de la jornada para observar y recibir reclamos respecto del mismo. Además, realizó acciones de sensibilización y promoción de los derechos de las personas migrantes en la Ciudad.
