Los padres de la comunidad educativa de este Jardín convocaron al defensor adjunto a partir de los daños que se produjeron en la estructura edilicia del lugar durante las tormentas del mes de abril.
Los docentes comentaron al personal de la Defensoría del Pueblo la grave situación que les toca afrontar y el miedo constante de que los escombros caigan sobre ellos o sobre los menores.
Además, varios salones no cuentan con techos, incluidas las salas donde niños de entre 3 y 4 años toman clases todos los días.
Desde la Defensoría se les extendió apoyo en el proceso del reclamo – en función del pedido de informe iniciado el 18 de mayo desde la Conducción Ejecutivo de Derechos Sociales- destinado a la realización de las obras necesarias para refaccionar la institución.