El taller, que se llevó a cabo en el auditorio de la sede central del organismo ubicada en Avenida Belgrano 673, se basó en un panel coordinado por Garbini y conformado por Fernanda Franchella e Isabel Ramos Vardé, de la Gerencia de Calidad y Prestación de Servicios de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT); Jacqueline Spengler, miembro de la Junta Evaluadora del Servicio Nacional de Rehabilitación dependiente de Ministerio de Salud de la Nación; Mercedes Rozental, titular de la Comisión para la plena Participación e Inclusión de las personas con Discapacidad (COPIDIS); y Gladys Guarrera, directora del Centro Integral de Discapacidad de la Dirección General de Hospitales perteneciente al Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires.
Al inicio del encuentro, la subgerente de Calidad y Prestación de Servicios de la CNRT, Franchella, manifestó que “procuramos que las Defensorías puedan conocer bien la manera de efectuar los reclamos y así puedan ayudar a las personas a elaborar las denuncias para que lleguen a buen término”. Según la funcionaria, las multas se están aplicando y son cada vez mayores, pero añadió que: “La única manera de poder solucionar los problemas de la falta del pase libre para el transporte público es que se hagan la denuncias”.
Por su parte, Ramos Vardé señaló que se encuentran capacitando a los conductores de micros en todo el país sobre el trato que deben brindar y los derechos que tienen las personas con discapacidad en el transporte, en cuanto a la accesibilidad, a la autonomía y a las normas del sistema nacional a las que deben ajustarse.
En tanto, Spengler se refirió específicamente a explicar cuáles son las características del CUD y cómo se tramita. “Habiendo podido obtener un CUD no solo en Buenos Aires sino en todo el país, después de mucho tiempo y un largo proceso, alcanzamos un logro muy importante”, expresó.
La titular de COPIDIS, en su exposición, efectuó una presentación general acerca de las misiones y funciones de la institución, enfocadas fundamentalmente en la inclusión de las personas con discapacidad y en la necesidad de naturalizar la diversidad de manera transversal. Asimismo, indicó que las áreas de trabajo de la COPIDIS están relacionadas con los artículos de la convención sobre los derechos de las personas con discapacidad, como la ley de accesibilidad física, el acceso a la información, la normativa de educación inclusiva, la ley de cupo y la articulación con el tercer sector. Además, mencionó que desarrollan programas de apoyo para la vida independiente, de capacidad jurídica y de ayuda a la comunidad.
Rozental enfatizó que “una persona con discapacidad está definida en la interacción con un entorno que tiene barreras actitudinales, comunicacionales y edilicias que limitan activamente su participación”. Con relación a los inconvenientes con la obtención o entrega de los CUD, dijo que se trata de un documento que “habilita derechos y que es confidencial, no es ponerle un sello de discapacitado a nadie”. Para concluir opinó: “Es importante empoderar a las personas con discapacidad para que sean dueños de sus propias vidas y para que puedan luchar ellos mismos por sus derechos y por las cosas que desean”.
Por último, Guarrera, reconoció que “una parte de las enfermedades poco frecuentes tiene que ver con los déficit mentales y es, en este sentido, donde tenemos mayores dificultades en el tiempo de demora para acceder a una junta evaluadora que otorgue el certificado”. Aclaró que, si bien se encuentran trabajando permanentemente en mesas interdisciplinarias y se tiene toda la energía puesta en facilitar el acceso al habitante de la ciudad de Buenos Aires al certificado de discapacidad, los tiempos no son los deseados”.
