Además, se plantearon una serie de preocupaciones tales como la situación de los programas que permanecen en la Dirección de Niñez, la continuidad de las condiciones de trabajo de los profesionales, y el respeto por la jerarquía funcional y salarial de los trabajadores transferidos y los contratados a través de convenios con ONGs. En este sentido, las autoridades aseguraron que la continuidad del personal se encuentra garantizada y se refirieron al trabajo consensuado con los equipos.
Por otra parte, se manifestó la necesidad de revisar la celebración de convenios con hogares ubicados en la Provincia de Buenos Aires y alejados de las familias de los niños, avanzar con la jerarquización de la carrera del personal de infancia y adolescencia, y dotar de mayores recursos y presupuesto a los programas destinados al fortalecimiento de vínculos y a las políticas de atención.
Finalmente, los participantes dialogaron sobre la eventual modificación de la ley de protección de las infancias y la viabilidad de estrategias alternativas a la reforma legislativa, tal como la introducción de cambios en la ley 2339 de trasferencia de competencias de las áreas de infancia. Al respecto señalaron que en el caso de constituirse un organismo único, será necesario establecer qué dependencia realizará el control y seguimiento de las políticas implementadas.
Participaron del intercambio la vicepresidenta del Consejo de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, Adriana Martínez Bedini; la titular de la Dirección General de Niñez y Adolescencia, Carolina Díaz; la Defensora y el Defensor Adjunto de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Marisa Graham y Facundo Hernández; Jazmín Lerner, en representación del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat; personal de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia; y la responsable del Programa de Niñez, Adolescencia y Género de la casa, María Elena Naddeo.
