El relevamiento se llevó adelante entre febrero y abril, con la finalidad de conocer los niveles de cumplimiento del derecho a la vivienda en el barrio y sus diversos condicionamientos sociales, económicos, culturales, climatológicos y ecológicos. Consistió en una encuesta realizada a los titulares de las viviendas sobre su percepción vinculada al acceso a servicios esenciales, así como una indagación sobre la realidad socioeconómica de la población residente, las condiciones de habitabilidad y la situación actual de la infraestructura y los servicios en los espacios comunes, entre otros aspectos de interés.
Según se pudo comprobar, la población residente en el Bario Olímpico es mayoritariamente jóven, cuenta con empleo formal y tiene baja cobertura estatal (solamente el 6% de las personas entrevistadas manifestaron ser beneficiarios de la tarifa social por algún servicio público).
En relación a las condiciones de habitabilidad, se constataron problemas de humedad o filtraciones en las viviendas; insuficientes medidas de seguridad en balcones, escaleras y ventanas; y la existencia de revestimientos y cerámicos en mal estado, rajaduras en pisos y paredes, y aislación acústica inadecuada.
Los espacios de uso común, por otra parte, se destacan por la falta de estacionamientos para vehículos particulares, contenedores de basura, espacios verdes y/o de recreación y señalética vinculada a la seguridad vial, así como por el mal funcionamiento de los ascensores y la acumulación y desbordes de agua.
Sobre los servicios públicos, se pudo observar un grado de satisfacción en términos generales. Sin embargo solo el 25% de los encuestados manifestó percibir un mejoramiento de su situación, en virtud de las expectativas previas a la mudanza. Otro 64% aseguró encontrarse en condiciones similares a las que tenían antes de trasladarse al barrio.
El 63% de lo entrevistados realizaron en algún momento reclamos vinculados con el acceso a servicios públicos escenciales, en su mayoría dirigidos a las distintas empresas prestatarias.
El servicio que mayor déficit presenta es la electricidad. Al respecto, el 86% expresó haber sufrido algún tipo de inconveniente con esta prestación (facturas con titularidad a nombre del IVC y/o con categoría no residencial, sobrefacturaciones, liquidaciones con deudas o saldos anteriores sin información adecuada, no recepción de facturas y medidores cruzados).
Finalmente, casi la mitad pronosticó que tendrán dificultades para para afrontar los próximos pagos y un 85% consideró necesaria la implementación de una tarifa diferencial para los vecinos del Barrio Olímpico.
Por todo esto, la Defensoría del Pueblo destaca la necesidad de garantizar el acceso a los servicios públicos esenciales, en condiciones de calidad y cantidad adecuadas y suficientes.
Asimismo, de acuerdo a la información recolectada, se recomienda la implementación de una tarifa diferencial para usuarios residentes, la disposición de recursos para reforzar las condiciones de seguridad, la reparación de ascensores, la provisión de espacios adecuados y suficientes para el estacionamiento, el mejoramiento de la señalética, el aumento de los contenedores de basura disponibles, y la resolución de los problemas que afectan a las zonas comunes, tal como la presencia de agua estancada.