La Mesa de Trabajo sobre Parto Respetado, Derechos Sexuales y Reproductivos, constituida en la Defensoría del Pueblo con destacados y destacadas especialistas en la temática elaboró una serie de recomendaciones y consultas hacia el Ministerio de Salud de la Ciudad a fin de revisar los procedimientos vigentes en el contexto de la pandemia y de este modo “prevenir riesgos tanto en la población de mujeres, recién nacides y del personal que los asistirá durante todo el proceso de embarazo, parto y puerperio.”
Con el asesoramiento de prestigiosos académicos y profesionales como Mario Rovere, José Belizan de IECS, parteras de la maternidad Estela Carlotto como Melina Vicenti y Marina Vasco obstetras y médicos como Beltrán Lares y Alejandra Mazzeo entre otros, las recomendaciones tuvieron también el soporte académico a través de una consulta especial al director de OMS sobre reproducción humana Fernando Althabe.
Todo ello con la coordinación de Graciela Stulchnik de la asociación Parir y Nacer e integrante de la Secretaria de Genero de la APDH y la participación de María Elena Naddeo y otras profesionales de la Defensoría del Pueblo.
Tenemos particularmente en cuenta las recomendaciones formuladas por el Ministerio de Salud de la Nación de fecha 6 de marzo de 2020, tituladas “Medidas generales para garantizar el acompañamiento de la persona gestante o cursando el puerperio en el contexto de la pandemia COVID-19”, las cuales también se adjuntan.
Las principales ideas, interrogantes y recomendaciones giran en torno a los siguientes temas:
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La presencia y compañía a la parturienta de una persona de su confianza y cercanía afectiva es reiterado como positivo y de efectivo cumplimiento por toda la Mesa, tomando los recaudos de protección antiviral adecuados.
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No tiene ninguna justificación realizar inducciones del parto o cesáreas sin indicación en embarazadas sanas, con síntomas o confirmada la infección por coronavirus al final del embarazo
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No se justifica en embarazos de bajo riesgo la realización de los monitoreos fetales ante parto (no estresante) tal y como no tiene indicación en cualquier embarazada de bajo riesgo
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Tampoco se ha comprobado la transmisión vertical del virus (de la madre a su bebé intrauterino o recién nacido) ni a través de la leche materna. Por tanto, el apego oportuno piel con piel, el pinzamiento adecuado del cordón umbilical, la lactancia materna inicial y a libre demanda, y el alojamiento conjunto, se mantienen como protocolos de atención útiles y respaldados por la evidencia actual.
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Se plantea en líneas generales la necesidad de contar con un mecanismo de información y consulta telefónica ágil hacia las pacientes y la posibilidad de vigilancia sanitaria domiciliaria pre y post parto.
Estas y otras inquietudes continúan siendo materia de estudio y debate frente a la emergencia sanitaria, por lo que se ha solicitado a la Dirección de Maternidad e Infancia del Ministerio de Salud opinión y líneas de orientación hacia la comunidad. Se adjunta el informe completo y las recomendaciones del Ministerio de Salud de Nación.