«Los datos aumentan pero seguimos sin tener una respuesta del Estado, la cual necesitamos que llegue lo antes posible». Así se expresó el Defensor del Pueblo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Alejandro Amor, en la presentación del Primer Censo Popular de Personas en Situación de Calle.
El informe fue elaborado en conjunto por 40 Organizaciones Sociales, el Ministerio Público Fiscal, la Auditoría General de la Ciudad y la Coordinación de Organizaciones Sociales de la Defensoría del Pueblo porteña.
Junto a Amor, participaron Horacio Corti, Defensor General de la Ciudad; Christian Gruenberg, responsable del Programa de Violencia Institucional de la Defensoría; Cecilia Segura, responsable de la Auditoria General de la Ciudad; Horacio Ávila, director del Centro de Integración Frida y Monteagudo; y Claudia Enrich, de la organización Ciudad sin Techo.
Los resultados arrojaron que casi 4500 personas se encuentran viviendo en situación de calle en la Ciudad. De estos, el 23 por ciento dijo que el año pasado no se encontraba en esta situación. Las organizaciones señalaron que el número se eleva a 5872 si se cuentan las personas que duermen en los paradores e institutos que ofrece la Ciudad de Buenos Aires para no dormir a la intemperie.
“Es hora de que desde el Estado en la Ciudad de Buenos Aires se conforme un Consejo junto con el Ministerio de Desarrollo Social y las organizaciones sociales, para que se trate y se resuelva esta problemática. Donde se discuta claramente y se defina cuáles van a ser las políticas que se van a aplicar, y cuál va a ser la partida presupuestaria que se va a asignar”, declaró Amor, quien se comprometió a llevar los resultados del Censo para proponerle al Ministerio de Desarrollo Social porteño la conformación de una mesa de trabajo para tal fin.
Y concluyó: “el Estado tiene la responsabilidad de resolver los problemas que tiene adelante, sobre todo este tipo de problemas que son los de mayor vulnerabilidad”.