La Justicia le dio la razón a Denegri en primera y en segunda instancia, pero Google apeló y el caso llegó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN), que mas allá de la determinación a tomar, establecerá un estándar sobre si las personas pueden pedir a los buscadores que dejen de exponer noticias del pasado que consideran perjudiciales.
El escrito presentado esta mañana señala que el encuadre normativo para dar solución a la cuestión en debate está en el campo del hábeas data y que por ello resulta apropiado la desindexación o el deslistado de la información personal. “Tenemos derecho a la protección de la privacidad, reconociendo la dignidad de las personas y la prohibición de injerencias arbitrarias o abusivas a la vida privada”, destaca.
Además, se manifiesta que los derechos en materia de datos personales también deben garantizarse por el entorno digital y que de esta manera las personas puedan controlar qué acciones realizan terceros con su información.
Entre las conclusiones del documento se expresa: “Sabemos que es un caso complejo, pero el Tribunal se encuentra frente a una indudable oportunidad para discutir los desafíos que impone el entorno digital en relación con la protección de los datos personales”.
La Defensora del Pueblo porteña, María Rosa Muiños, reflexionó que “en estos tiempos en que la tecnología invade nuestras vidas, el ‘derecho al olvido’ se torna fundamental para proteger el derecho al honor y a la intimidad de las personas. La revolución de las nuevas tecnologías es una realidad con la que convivimos a diario y nos obliga a repensar las regulaciones jurídicas para que podamos desarrollar libremente nuestro plan de vida sin injerencias externas”. En relación con el caso de Natalia Denegri, la Defensora especificó que se trata de una oportunidad para nuestra Corte Suprema de sentar las bases jurisprudenciales de esta figura jurídica en consonancia con los estándares internacionales en protección de derechos personales”.
Por su parte, el Defensor de la Provincia de Buenos Aires, Guido Lorenzino, declaró que “la Corte tiene en sus manos un caso que va a fijar la dinámica de desempeño de los derechos humanos en el presente y futuro. Le pedimos que contemple la trascendencia social de esta decisión”.