Marielle tenía 38 años, había nacido en una favela y era relatora de la comisión creada para fiscalizar las operaciones policiales en el marco de la intervención militar en Rio de Janeiro.
El miércoles por la noche, el auto en el que volvía de un acto de empoderamiento de mujeres negras junto a otros ocupantes fue baleado y como resultado del ataque Marielle recibió 4 disparos que le ocasionaron la muerte.