De acuerdo al comunicado de la Sociedad Argentina de Mastología, “la demora excesiva en las consultas puede acarrear riesgos mayores a los que se pretende evitar. Es por esto que sugerimos a quienes hayan retrasado sus controles, retomar los mismos de manera de no perder la posibilidad de la detección oportuna de las patologías de la mama. Dado que la situación epidemiológica es disímil en distintos puntos del país, esta sugerencia aplica a las localidades con una dinámica de estabilidad del número de casos o con tendencia a la baja, mientras que deberá considerarse un enfoque más conservador en los puntos del país en los que se esté experimentando un aumento del número de casos de COVID-19”.
Al respecto, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, entre las recientes medidas en la nueva etapa del aislamiento social, preventivo y obligatorio (ASPO) por el coronavirus, consta la atención en consulta ambulatoria programada (con turno), respetando los protocolos establecidos.
¿Qué es el cáncer de mama?
En nuestro país, es la primera causa de muerte por tumores en mujeres. Es una enfermedad causada por la multiplicación anormal de las células de la mama que conforman un tumor maligno, el cual puede invadir tejidos vecinos, ganglios linfáticos regionales e incluso órganos del cuerpo más alejados. Se habla de metástasis cuando se disemina a otras partes del cuerpo.
¿Solo afecta a las mujeres?
No, puede afectar tanto a hombres como a mujeres. Sin embargo, el cáncer de mama es el más común entre ellas, afectando en su mayoría a las que tienen entre 45 y 70 años. Mientras que sólo el 1% de los cánceres de mama se presenta en hombres.
Según el Observatorio Global de Cáncer de la OMS, en nuestro país, el cáncer de mama es el de mayor magnitud en cuanto a ocurrencia para 2018, representado el 17% de todos los tumores malignos y casi un tercio de los cánceres femeninos.
Prevención
El cáncer de mama se puede detectar a tiempo. Lograr una detección precoz mejora el pronóstico y la supervivencia de las pacientes.
El autoexamen de mama es una herramienta que contribuye a la prevención y le permite a la mujer el conocimiento de su cuerpo y tomar conciencia de sus cambios. Es un chequeo simple que cada una puede realizar en su casa, una vez por mes, mediante la palpación y observación de sus mamas con el fin de detectar la presencia de protuberancias, dolor o cualquier cambio en la textura, color o forma de las mamas, los pezones y las axilas.
Encuentres o no alguno de estos hallazgos es importante la consulta con el/la profesional, porque el autoexamen mamario no reemplaza la consulta médica periódica ni los estudios que permiten una detección precoz.
El examen físico mamario realizado por el médico/a, estudios por imágenes cuya indicación depende de los antecedentes personales y/o familiares de la enfermedad y factores de riesgo de cada mujer (ecografía, mamografía y resonancia magnética) permiten estudiar la mama; y en el caso de ser necesario, la toma de una muestra de lesión (biopsia) permitirá obtener mayor certeza diagnóstica y definir la conducta terapéutica a seguir.
En general, en sus estadios iniciales, el cáncer de mama es asintomático: no encontraremos signos y síntomas que nos llamen la atención. Es por esto, que se enfatiza tanto en la realización de los controles para una detección temprana, cuando las posibilidades de curación son mayores y es posible aplicar tratamientos menos agresivos.
La Sociedad Argentina de Mastología recomienda «una mamografía de base a los 35 años en pacientes asintomáticas, y en caso de tener antecedentes familiares, el primer control debe hacerse 10 años antes de la edad en que el/la familiar tuvo cáncer de mama». La mamografía permite detectar el cáncer de mama cuando el nódulo no es palpable aún.
Si bien el cáncer de mama no se puede prevenir de forma absoluta, además de concurrir a los controles médicos, podemos intervenir sobre los factores de riesgo modificables, es decir, que los podemos cambiar adoptando un estilo de vida saludable: realizar ejercicio físico con regularidad, limitar el consumo de alcohol, no fumar, tener alimentación saludable, evitar el sedentarismo y el sobrepeso.
Si bien es cierto que la lactancia materna tiene un efecto protector frente al cáncer de mama y disminución del riesgo, no garantiza que la enfermedad no aparezca.
Tratamiento
Las personas con diagnóstico de cáncer de mama tienen derecho a ser informadas, escuchadas y a recibir tratamiento oportuno. En nuestro país, los tratamientos oncológicos tienen una cobertura del 100% para pacientes de hospitales públicos, para beneficiarios/as de obras sociales o afiliados/as a empresas de medicina prepaga.
Existen diversas opciones de tratamiento- cirugía, radioterapia, quimioterapia y/o hormonoterapia- para realizar una vez detectado el cáncer de mama, el cual se determinará de acuerdo al tipo de cáncer, el estadio en el que se encuentre, las características de cada paciente y evaluación del médico tratante. El tratamiento puede incluir más de una opción.
Es importante mencionar que si el tratamiento indicado es la realización de una mastectomía (cirugía en la que se extirpa todo el tejido mamario), de acuerdo a lo establecido en la Ley Nacional 26872: “Todos los establecimientos de salud públicos y las obras sociales enmarcadas en las leyes 23.660 y 23.661, la Obra Social del Poder Judicial de la Nación, la Dirección de Ayuda Social para el Personal del Congreso de la Nación, las entidades de medicina prepagas y las entidades que brinden atención al personal de las universidades, así como también todos aquellos agentes que brinden servicios médicos asistenciales independientemente de la figura jurídica que tuvieren, deben incluir la cobertura de la cirugía reconstructiva como consecuencia de una mastectomía por patología mamaria, así como la provisión de las prótesis necesarias”.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires podés realizar una consulta médica y/o el chequeo mamario anual en los hospitales generales de agudos. La atención es pública y gratuita. Consultá aquí el nosocomio más cercano a tu domicilio.
Para más información sobre prevención de cáncer de mama, cáncer cérvico uterino (cuello de útero), cáncer colorrectal o preguntar sobre PAP, test de VPH o cuidados paliativos, podés comunicarte a la línea gratuita 0800-333-3586 del Instituto Nacional del Cáncer.