Durante la actividad, se debatió sobre las disitntas formas de sufrir y vivir las militancias de los años ’70 por parte de las mujeres, la resistencia frente a la represión del terrorismo de Estado, y los encuentros y desencuentros entre los feminismos y los organismos de derechos humanos.
Asimismo, se reconoció el recorrido de las militantes políticas y sociales que lucharon por una sociedad igualitaria, tales como las Madres y las Abuelas de Plaza de Mayo, y la resistencia de las presas políticas que sobrevivieron al cautiverio con organización interna y solidaridad.
Por último, se abordó el hecho de que los delitos contra la integridad sexual no fueron tenidos en cuenta como delitos autónomos durante los primeros 20 años de denuncias y procesamiento de los responsables del genocidio. En este sentido, resulta fundamentar recordar que los juzgados federales de Capital Federal, Córdoba y Rosario empezaron a definir como delitos autónomos de lesa humanidad a las violaciones y agresiones sexuales sufridas por las mujeres durante la Dictadura, motivados por las distintas presentaciones relalizadas por ex detenidas y al crecimiento de la conciencia de género.
Participaron del Conversatorio, la titular del Programa de Niñez, Adolescencia y Género de la casa, María Elena Naddeo; la investigadora de la Universidad de Río Negro a cargo del proyecto “Mujer y Dictadura”, Mariana Rulli; y la militante por los derechos humanos e integrante de “Nosotras, expresas políticas”, Emperatriz “Monena” Márquez. La jornada contó, además, con la coordinación de la titular del Observatorio, Gretel Galeano, y el director provincial de Derechos Humanos, Luis Hernán Velardez.