Desde 2014, la Coordinación Operativa de Villas sostiene una reunión semanal con el Cuerpo de Delegados del Barrio Padre Ricciardelli. En 2017, el Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC) comenzó a sumarse a este espacio y, luego de un año de trabajo, dicho organismo ha impulsado un censo barrial, en el marco del proceso de integración socio-urbana.
Según funcionarios de IVC, el censo permitirá obtener información socio-espacial de las viviendas, proveerá información suficiente para consensuar obras de infraestructura para el barrio y permitirá determinar emergencias críticas a las cuales ir atendiendo.
El censo se inició a principios de agosto y se lleva a cabo todos los fines de semana. En la actualidad se encuentra ya finalizada la primera etapa, con el primer “barrido” de las manzanas del barrio. Terminada esta primera etapa, se trabajará sobre la población que estuvo ausente durante esa primera pasada.
Hasta ahora, se han identificado ya 12 mil familias que viven en el barrio. Esta información se completará con la próxima recorrida, para censar a los ausentes.
La Defensoría cumple en este caso un rol de veedora del proceso y, en ese marco, acompaña una selección de censistas por fin de semana.
A la vez, desde la Defensoría del Pueblo se tiene presencia en el barrio con una sede de atención al público y trabajo territorial. Allí se reciben también, consultas o denuncias por parte de los vecinos y vecinas, en relación al censo y otros temas.
