Bandera Argentina
Santarelli

La Defensoría tendrá una nueva sede en la casa donde vivió Monseñor Podestá

Luego de que el Defensor de Pueblo porteño, Alejandro Amor, visitara hace pocas semanas la casa de Monseñor Jerónimo Podestá y su mujer Clelia ubicada en el barrio de Caballito y apoyara su preservación, esta Defensoría anunció que pondrá en esa casa histórica una nueva sede del organismo que estará destinada a recibir consultas de los vecinos.

La subsecretaría de Descentralización de la Defensoría, Natalia Santarelli, se reunió hoy con la hija de Clelia en esa casa -ubicada en Av. Gaona 1367- y sellaron el acuerdo, que se anunciará oficialmente en las próximas semanas.

Al margen del valor económico, la importancia de esta propiedad es simbólica, ya que fue el escenario de una histórica lucha de parte de Jerónimo y Clelia, que juntos crearon la Federación Latinoamericana de Sacerdotes Casados, desde donde lucharon porque el celibato sea optativo.

Luego de la muerte de Podestá, cuyos restos fueron velados en el Salón de los Pasos Perdidos de la Legislatura porteña, su mujer continuó viviendo en la casa de Gaona, donde recibía con asiduidad las llamadas del Papa Francisco, con quien ambos habían forjado una profunda amistad en la época en la que él se encontraba al frente del arzobispado local.

Desde que murió Clelia Luro en 2013, su hija -que lleva el mismo nombre- continuó la pelea para que la casa sea respetada como patrimonio cultural. Es por eso que la Defensoría del Pueblo acudió al lugar con el objetivo de contribuir a que se respete el valor de la casa y no se la utilice con fines diferentes a los que reclama su dueña.