Maria Elena Naddeo, directora del Centro de Atención de la Niñez, Adolescencia, Género y Diversidad de la Defensoría, expresó su reconocimiento a las tareas de prevención, capacitación y acompañamiento a las víctimas relatadas por las organizaciones participantes del encuentro, y señaló que «la trata de personas constituye un nueva forma de esclavitud y resulta imperioso unir los esfuerzos de la sociedad civil y de los organismos públicos para su prevención y deteccion». Naddeo detalló las acciones realizadas por la institución, los proyectos de ley presentados por el Defensor del Pueblo Alejandro Amor y los primeros resultados obtenidos como consecuencia de estas iniciativas.
Los y las presentes expresaron la preocupación por el inminente cierre del Registro Nacional de Trabajadores y Empleados Agrarios (RENATEA ), que había empezado a relevar e inspeccionar con total objetividad los campos y emprendimientos rurales.
En el congreso se escucharon también las voces de víctimas ya recuperadas, en especial de mujeres que lograron superar la situación de trata y prostitución, y hoy se transformaron en verdaderos ejemplos de militancia comprometida con la eliminación de estas violencias, y se establecieron iniciativas y propuestas para profundizar la tarea en 2016.