Personal de la Dirección de Educación, Ciencia, Cultura y Tecnología dependiente de la Subsecretaría de Derechos Sociales y de la Subsecretaría de Derechos Humanos estuvo presente ayer en la Escuela Normal Superior Nº 2 «Mariano Acosta», apoyando el reconocimiento que esa comunidad educativa le hizo a la profesora Raquel Papalardo.
Tras una década como rectora del Mariano Acosta, la profesora Papalardo supo conducir un proyecto pedagógico que hizo de los Derechos Humanos un eje transversal sustentado en tres pilares fundamentales: la unidad académica, la memoria institucional y la relación con la comunidad, lo que se expresa en la articulación entre las distintas unidades académicas que conviven en la institución (inicial, primario, medio, superior) y la participación activa de los distintos actores (docentes, estudiantes, directivos/as).
Papalardo mantuvo vigente el legado de esa prestigiosa institución educativa e incorporar una impronta que, sin dudas, dejará su huella en el sistema educativo.
A lo largo de estos años, la Defensoría del Pueblo acompañó sus iniciativas y sus reclamos en diversos momentos: al reclamar por las obras de infraestructura que se demoraban, por la construcción del jardín de infantes, defendiéndola cuando quisieron sumariarla por haber participado de un juego con sus estudiantes y, últimamente, cuando defendió a los estudiantes a su cargo cuando personal policial ingresó sin permiso al establecimiento.
En esta nueva etapa de su vida, seguramente Papalardo continuará aportando su experiencia y prestigio en pos de una educación inclusiva y de calidad y defendiendo como siempre el derecho a la educación.