La tragedia dejó como consecuencia la muerte de dos menores. El lugar del siniestro es una casa que funcionaba como taller clandestino en el barrio de Flores.
Los padres de uno de los menores fueron atendidos en la guardia. La señora se encuentra con oxígeno y quedará en observación.
Posteriormente, un asistente social y la psicóloga, pertenecientes al hospital, anoticiaron a los padres de lo ocurrido. También llegó al lugar personal de Derechos Humanos del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que confirmó que se ocuparían de comunicarse con el BAP.