Personal de la Dirección de Emergencias y Contención Psicosocial, de la Dirección de Gestión Operativa y de la Subsecretaría de Derechos Sociales de la Defensoría se presentó en el complejo Mariano Castex, ubicado en Crisóstomo Álvarez 2582 del barrio de Flores, Torre 4, donde en un departamento del primer piso se produjo una explosión y un incendio, que causó la muerte de una anciana y un saldo de 16 personas heridas.
Luego, parte del equipo se trasladó a los Hospitales Santojanni, Durand y Piñero para brindar asistencia a los damnificados. Se les informó que los afectados por inhalación de monóxido de carbono fueron atendidos en la guardia y que ya habían sido dados de alta.
Se puso a disposición todos los recursos del organismo y, en tanto, el Defensor del Pueblo, Alejandro Amor, se comunicó con el presidente comunal para reclamar la iluminación del predio afectado. Los vecinos denuncian que las autoridades del gobierno porteño y de la comuna no los asisten con la seguridad y con los trámites por la pérdida de sus documentos.
El Barrio Mariano Castex (ubicado entre las avenidas Balbastro, Varela, Lafuente y Crisóstomo Álvarez, lindero al hospital Piñero) fue planificado por la Comisión Municipal de la Vivienda (CMV) hacia el año 1969 (concebido como Conjunto San Pedrito). Se trata de un complejo habitacional compuesto por nueve monoblocks de cuatro pisos y ocho torres de 13 a 15 pisos, inaugurados entre 1970 y 1980.
El 24 de septiembre de 2009, la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires aprobó la Ley 3199, que impulsaba la puesta en valor del Barrio Castex y estaría a cargo del Instituto de la Vivienda de la Ciudad (IVC).
El pasado 25 de julio, los vecinos que conversaron con el personal de la Defensoría precisaron que las primeras pericias indicaron que el siniestro se produjo debido a un accidente doméstico en un departamento del primer piso del edificio, por el horno o la estufa.
Relataron también que se hicieron presentes en el lugar el SAME, Bomberos de la Policía Federal, la Guardia de Auxilio y Emergencias del Gobierno de la Ciudad y el Programa Buenos Aires Presente dependiente del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat.
Según señalaron, los bomberos y las ambulancias se tuvieron que quedar en la vereda y llevar las camillas a través del parque ya que no hay rampas de acceso al interior del complejo. Por otra parte, los mismos vecinos ayudaron a los bomberos a tirar las mangueras porque, si bien está pedida hace un tiempo una boca de incendio para el lugar, la más cercana estaba en la torre 5 a varios metros del lugar.
En el año 2014, se presentó un amparo (“BERNARDIS LILIA BEATRIZ y otros CONTRA GCBA SOBRE AMPARO”, EXPTE. Nº: A699-2014/ 0), que tuvo sentencia a favor en junio del 2015, donde la Ciudad de Buenos Aires fue condenada por la Justicia a ejecutar las obras de “puesta en valor” del Barrio Castex, tal como lo estableció en 2009 la Ley 3199. Dicho amparo tramita ante el Juzgado Nº 15 en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad, del Dr. Víctor Trionfetti. Las obras pendientes incluían recuperación de espacios públicos y fachadas, juegos infantiles, veredas externas e internas y construcción de rampas. Sin embargo, el Gobierno porteño apeló la medida y la decisión de la Cámara todavía está pendiente.
Asimismo, los vecinos manifestaron que quienes habitaban el primer piso perdieron todo (muebles, documentos, electrodomésticos, etc.) y que les fue advertido que se puede tardar hasta un año en reparar los daños. Existe preocupación también por la seguridad ya que las puertas que no estallaron fueron destrozadas por los bomberos para entrar, razón por la cual la gente teme que les ocupen las viviendas cuando se vaya la custodia de Gendarmería.
Además, reclaman que ante el desalojo completo de la torre sólo se les ofreció ir a paradores, excepto a una pareja de discapacitados del primer piso a la cual se le había prometido ir a un hotel, de quienes no tuvieron más información. El personal de la Defensoría proveyó los datos para continuar en contacto y se acordó hacer un listado de los habitantes del inmueble y sus necesidades.
Cabe aclarar que el lugar cuenta con 55 unidades funcionales, donde habitan entre 20 y 30 menores, numerosos ancianos y unas 18 personas discapacitadas.
