Madre de tres hijos e hijas, una de ellas con graves problemas de salud, necesitaba con urgencia contar con una vivienda que le permitiera vivir dignamente junto a su familia y así poder dar el adecuado cuidado a la niña.
La vecina solicitó la intervención de la Defensoría tras elevar diversos pedidos al Instituto de la Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires (IVC), cuyos resultados en todas las ocasiones fue negativo.
A los recursos económicos escasos con que contaba se sumaba la grave enfermedad de su hija, con trastornos del desarrollo, epilepsia, gastrotomía y malformaciones congénitas del encéfalo. La niña estaba alojada desde 2010 en el Hogar Promover, donde recibía el cuidado imprescindible a su estado. Cabe mencionar que la vivienda donde habitaba la familia no sólo era muy pequeña sino que además no contaba con las instalaciones adecuadas para dar contención a la salud de la niña.
Al tomar conocimiento de la situación que aquejaba a la vecina, desde el Centro de Atención de Niñez, Adolescencia, Género y Diversidad de la Defensoría se trabajó para lograr el pleno ejercicio de los derechos tanto de la madre como de los niños y niñas. Es por ello que desde el área se elevó el pedido al IVC para que arbitre las medidas necesarias para garantizar el derecho a la vivienda del grupo familiar de referencia, concluyendo con la recomendación 262/2014 firmada por el Defensor del Pueblo Alejandro Amor.
Los esfuerzos llevados a cabo dieron sus frutos, ya que el pasado jueves 7 de julio –después de innumerables gestiones y búsquedas de inmuebles- la vecina, acompañada por la Defensoría del Pueblo, pudo escriturar la vivienda con el crédito otorgado por el IVC, garantizándose así tanto para ella como para sus hijos e hija el derecho a una vivienda digna y la inclusión del grupo familiar.
