colonias de invierno

El funcionamiento de las colonias deportivas de invierno para personas con discapacidad

La Subsecretaría de Deportes y Recreación Social de la institución realizó un amplio relevamiento de las sedes, los materiales, la alimentación, el transporte y los profesionales puestos a disposición para llevar a cabo las actividades.

En el marco del Programa de Colonias Deportivas para Personas con Discapacidad que la Subsecretaría de Deportes del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires lleva a cabo todos los sábados de abril a noviembre, se realizaron del 18 al 29 de julio en el Polideportivo Avellaneda, Chacabuco, Martín Fierro, Parque Sarmiento y en el Servicio Nacional de Rehabilitación (Ramsay) las Colonias Deportivas de Invierno.

La Subsecretaría de Deportes y Recreación Social de la Defensoría realizó un amplio relevamiento de las sedes, los materiales, la alimentación, el transporte y los profesionales puestos a disposición para llevar a cabo las actividades.

En tal sentido, se ha encontrado que en todos los parques el personal afectado a la colonia invernal, que es el mismo que presta servicios en la colonia anual, no cobra sus honorarios desde el mes de abril, sin precisiones respecto de la posible fecha de pago, ni del ajuste de  los montos con los cuales serán retribuidos por sus tareas, lo que más allá de malestar ha generado la ausencia de profesionales en áreas de fundamental importancia.

Al mismo tiempo, el Gobierno de la Ciudad no aportó materiales deportivos para el desarrollo del programa, ni estandarizados ni específicos, los cuales permitirían potenciar las capacidades de los destinatarios y ampliar la propuesta recreativa. Asimismo, no hubo provisión de materiales de librería motivo por el cual no se han observado los talleres de plástica que habitualmente se desarrollan.

Por último, en cuanto a las irregularidades comunes, cabe destacar que a excepción del Centro Nacional de Rehabilitación (Ramsay) la infraestructura del resto de las sedes puesta a disposición de los colonos se encuentra en regular estado de conservación, vidrios rotos, alambres salientes, solados con faltantes de materiales constitutivos son algunos de los principales inconvenientes.

En cuanto a las observaciones particulares de cada una de los parques, cabe resaltar en el Polideportivo Avellaneda y Chacabuco la falta absoluta de calefacción de los espacios cubiertos, lo que los convierte en poco propicios tanto para los asistentes como para el personal docente y no docente afectado al mismo. En el Avellaneda el comedor se ha instalado además en un pasillo con iluminación deficiente, la cocina se encuentra en deplorable estado de conservación y falta hemogluco test y tiras reactivas en el consultorio médico para el control del amplio universo de colonos con diabetes. En el Parque Chacabuco la colonia no contaba con médico propio, lo que se repitió en el Parque Sarmiento, en donde además el déficit alcanzaba a la psicóloga. Para finalizar, en Ramsay se utilizaba el gimnasio de musculación -que no cuenta con calefacción y obliga a la convivencia de colonos y deportistas- como comedor, lo que se viene repitiendo en otras ediciones y que fuera oportunamente objetado a la administración anterior.

Por otra parte, la Defensoría realizó acciones de promoción de derechos en las cinco sedes, donde entregó material institucional tanto a los asistentes y sus acompañantes como a los usuarios de los parques durante el receso invernal.