El sábado 5 de marzo, alrededor de las 17, la policía detuvo a la pareja por un supuesto llamado al 911 que denunciaba que un niño estaba siendo agredido por dos mayores.
Los dos hombres estuvieron detenidos sin explicación alguna durante más de seis horas en la comisaría sin ser notificados del por qué de su detención. Durante ese tiempo tampoco les tomaron declaraciones ni los dejaron llamar a un abogado.
Al ser liberados, les informaron que el menor estaba en el Hospital Pirovano y les mostraron un papel en donde se notificaba que estaban imputados en una causa por lesiones, aunque cuando al niño se lo llevaron al hospital para revisarlo, se les comunicó a la comisaría que no estaba marcado ni tenía señales de agresiones.
“Una vez que nos sacaron del calabozo nos dijeron que no había restricción pero que, igualmente, no podíamos llevarnos a nuestro hijo a casa, que se iba a quedar en el hospital a disposición del juzgado y del consejo”, relataron.
Los padres del menor manifestaron que “nosotros adoptamos a nuestro hijo en agosto del año pasado, a través del RUAGA. El nene padece una discapacidad mental, exactamente trastorno oposicionista desafiante, según los psicólogos se trata de una conducta típica de alguien que vivió en un instituto».
Cuando los dos hombres llegaron al hospital, hablaron con la asistente social y la psicóloga, quienes les comunicaron que el niño estaba bajo custodia policial. Al querer ingresar a verlo el policía que lo custodiaba se puso violento y los echó del lugar.
El domingo a la noche, Maria Rachid, referente y dirigente social del área de discriminación y derechos humanos y la Defensoría LGBT (Lesbianas, gays, bisexuales y travestis) de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, se presentaron en el hospital para acompañar a la familia y poder dar una pronta solución a la problemática que se estaba viviendo.
Después de muchas horas de espera, iniciada la madrugada del lunes, los familiares y los papás pudieron irse con el menor a su casa.
Rachid expresó que “las personas en la plaza, la policía y las instituciones discriminaron a esta familia por tener un miembro con discapacidad y por ser una pareja del mismo sexo”. En este sentido, se anunció que se seguirá la causa y se acompañará a la familia en lo que sea necesario para esclarecer este caso de estigmatización seguido de violencia institucional por parte de las fuerzas de seguridad y el sistema de salud de la Ciudad de Buenos Aires.
