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Día Mundial de Lucha contra la Tuberculosis: el mensaje de la Defensoría

La conmemoración -que se realiza cada 24 de marzo- tiene como objetivo concientizar y brindar herramientas de prevención y tratamiento de la población, respecto de esta enfermedad.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) están promoviendo la unidad para juntos poder centrarse en cuatro puntos: 

• Prevenir la TB para contribuir a aliviar la pobreza.
• Mejorar el diagnóstico, el tratamiento y la curación.
• Poner fin a la discriminación y al estigma.
• Impulsar la investigación y la innovación. 

Cabe destacar que el Día Mundial de la Tuberculosis fue proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 24 de marzo de 1882. Durante ese año el médico alemán Robert Koch descubrió al microorganismo responsable de la enfermedad, y que ahora llamamos Bacilo de Koch. No obstante el tiempo transcurrido, la TB es, junto al VIH, la principal causa de muerte por enfermedad infecciosa globalmente. Según cifras de la OMS cada año mueren 1,4 millones de personas por TB.

Según la OMS, la tuberculosis está presente en todo el mundo y es una de las diez principales causas de mortalidad en el mundo. En Argentina, continúa siendo un problema de salud pública, ya que, en los últimos años el número de casos continúa aumentando. 

Según el boletín epidemiológico sobre tuberculosis en Argentina, en 2016 fueron notificados 11.560 casos, de los cuales el 90% fue clasificado como casos nuevos, recaídas y casos sin información de tratamiento previo; esto determina la transmisión del bacilo en la comunidad. Asimismo, la tasa de notificación de casos de tuberculosis aumentó del 2015 al 2016 de 24,9 a 26,5 por 100.000 habitantes, con un incremento de casos en grupos jóvenes.

¿Qué es la Tuberculosis? 

Es una enfermedad infecciosa que ataca mayormente los pulmones, aunque también, hay formas extrapulmonares. La transmisión se produce de persona a persona. Cuando un enfermo de TB pulmonar tose, estornuda o escupe, expulsa bacilos tuberculosos al aire a través de gotas de saliva. Alcanza que una persona inhale unos pocos bacilos para quedar infectada. 

¿Cuáles son los síntomas?

Los signos suelen ser leves por varios meses. La persona afectada podría tardar en buscar atención médica, pero provocando que el bacilo se trasmita a otras personas. 

Los indicios más significativos de que puede tratarse de TB son tos y catarro que duran por más de dos semana. Otros síntomas con los que se puede sospechar esta patología son: Expectoración con sangre, con o sin dolor torácico, dificultad para respirar, pérdida de peso, cansancio y debilidad, pérdida de apetito, sudoración nocturna, fiebre, resfríos repetidos y prolongados.

Se calcula que una tercera parte de la población mundial tiene TB latente: son personas infectadas por el Bacilo de Koch pero, que aún no se enfermaron ni pueden transmitir la infección. 

Tratamiento

Es muy importante tener en cuenta que la tuberculosis es una enfermedad que no solo es prevenible, sino que también se puede tratar y curar; siempre y cuando se disponga de los medicamentos necesarios y que estos se tomen de manera adecuada, tal como es prescripta por el médico tratante. 

El tratamiento estándar para la forma activa sensible a los antibióticos, consta de  una combinación de cuatro medicamentos que se administran durante seis meses como mínimo (aunque depende de cada caso en particular).

Es necesario recalcar la importancia de continuar con el tratamiento establecido hasta finalizarlo, ya que, con esto no solo permite al paciente curarse, evitar recaidas y muerte, sino que también, reduce la transmisión a la población y el desarrollo de tuberculosis resistente.

¿Cuáles son los grupos de riesgo?

Si bien la tuberculosis puede afectar a cualquier grupo etario, es más frecuente en  adultos en años más productivos de vida, principalmente entre 15 y 44 años, de sexo masculino.

Asimismo, las personas que se encuentran infectadas por el VIH tienen mayor probabilidad de desarrollar tuberculosis activa, lo mismo que ocurre con aquellas personas que se encuentran inmunodeprimidas por otras causas.

Cabe mencionar que, también, las personas tabaquistas corren mayor riesgo de enfermar. Así como, los convivientes de pacientes con tuberculosis, en particular embarazadas, niños, adolescentes y pacientes con comorbilidades.

¿Cómo se previene?

Si bien es necesario conocer cuáles son los síntomas y la forma de contagio. Es necesario contar con la vacuna BCG, con la cual no se previene la enfermedad sino las formas graves y diseminadas. Se aplica una única vez en la vida, a los recién nacidos antes de egresar de la maternidad. Esta vacuna se encuentra dentro del Calendario Nacional de Vacunación, por lo que, es obligatoria y gratuita.

También, es importante consultar tempranamente para obtener un diagnóstico precoz, cumplir con el tratamiento indicado por el médico, ventilar los ambientes y controlarse en el centro de salud más cercano periódicamente. 

La prevención es fundamental. Acercate a cualquier Centro de Salud (buscá el más cercano a tu domicilio aquí).