Desde la Sociedad Argentina Protectora de Animales, institución en la que se desempeñó como secretario hasta su fallecimiento, Albarracín, fue precursor en la lucha contra las riñas de gallos, la doma de potros, las corridas de toros y el tiro a la paloma. Fue el principal impulsor de la Ley Nacional 2786 de 1891 de Protección de Animales que prohibe los malos tratos, los declara actos punibles y sanciona con multas o arresto para quienes los ejerzan.
En 1907 Ignacio Albarracín gestionó junto a Ponciano Vivanco, presidente del Consejo Nacional de Educación, la celebración de la Fiesta del Animal. Tomaron como ejemplo la festividad del Domingo del Animal que realizaban los pastores de iglesias en Londres. Allí también se predicaba para inculcar el respeto por los animales. Con estos antecedentes, se logra organizar en Argentina la primera celebración para el día 29 de abril de 1908 aunque debió suspenderse por lluvia. Finalmente, se realizó el 2 de mayo siguiente. No obstante, en adelante, se continuó celebrando el 29 de abril. Impulsado por la Sociedad Argentina Protectora de los Animales e instituido por el Ministerio de Educación de la Nación, se celebra este día en su homenaje.
Desde la Defensoría se asumió el compromiso con los animales a través de la creación del Programa de Protección Animal, que brinda un espacio pensado para la promoción, protección y defensa de los derechos de los animales. A través de campañas de difusión y concientización promueve la educación preventiva contra el maltrato animal y la tenencia responsable de nuestras mascotas. En ese sentido, el programa también asesora y orienta a los/as vecinos/as de esta Ciudad que desean conocer las instancias para lograr formalizar denuncias de maltrato animal.
En la actualidad, el programa se encuentra impulsando un proyecto de ley que elaboró con el fin de que en todas las instituciones educativas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, públicas o privadas, de nivel primario, secundario y terciario se realice una Jornada de Tenencia Responsable. El objetivo de la misma es alcanzar la concientización sobre las necesidades básicas de los animales y trabajar sobre la prevención para la erradicación del maltrato y la crueldad. Se pretende fomentar empatía en la infancia y adolescencia desde la idea de que los animales deben ser respetados como así también promover una convivencia sana entre personas y animales.
