En el inmueble convivían quince familias y treinta menores, en su gran mayoría provenientes de República Dominicana. En el lugar se encontraban tres familias que estaban a la espera del BAP, que ya se había hecho presente a primera hora de la mañana cuando ellos no se encontraban en la vivienda.
Se brindó contención y asesoramiento a familiares y afectados en conjunto con la Coordinación Ejecutiva de Derechos Sociales, y se pusieron a disposición todos los recursos del organismo.
