En el lugar se presentó personal de Bomberos, de Prefectura y del BAP así como también de la Subsecretaría de Derechos Sociales de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad.
El derrumbe afectó a once familias con un total aproximado de 12 menores, sin heridos. Al presentarnos las personas mostraban signos de alteración producto del siniestro y de no saber dónde pasarían las noches subsiguientes.
Desde la Dirección de Emergencias se contacto a los afectados, se intervino con aquellos que lo requirieron y se puso todos los recursos del organismo a su disposición.