En su intervención, Quiroga señaló, entre otras consideraciones, que “durante los últimos 30 años se produjeron muchos cambios en relación al sujeto, la sustancia y el contexto. La droga no distingue clase social y se ubica allí, en todos los sectores con la característica que le es propia de cada sector social. En los sectores más vulnerables o excluidos se aloja en los huecos de la ruptura de la trama social, allí donde la pobreza agrava siempre todas las cosas. Las familias carecen de puntos de apoyo para ejercer las funciones primordiales y encuentran en la droga un modo de supervivencia”.
Acompañaron por la Dirección de Promoción Humana, Adicciones y Salud Mental de la Defensoría Juan Pedro Gallardo y Fernando Torres. También estuvieron presentes alumnos, organizaciones comunitarias, como la Asociación Civil Centro Aguafuertes, la Sociedad de Fomento General Paz; la Red Parque Chacabuco–Flores de la Comuna 7 y efectores públicos como Casa Flores.