Bandera Argentina
capacitacion naddeo 1500x750

Capacitación de protocolo de violencia de género

El Ministerio de Educación porteño inició la capacitación al personal docente sobre el Protocolo de Violencia de Género en secundarios y terciarios. Contó con la presencia de miembros de la Dirección General de la Mujer, la Subsecretaría de Educación, la Subsecretaría de Derechos Humanos y el Programa de Niñez, Adolescencia y Género de la Defensoría.

El compromiso asumido por la Defensoría del Pueblo de la Ciudad frente a docentes y estudiantes en las jornadas de setiembre del 2017 se esta empezando a concretar. El protocolo solicitado por los Centros de Estudiantes fue elaborado de manera participativa con los representantes de las escuelas y enviado al Ministerio de Educación. Después de diversas modificaciones fue aprobado por resolución ministerial y enviado a los establecimientos educativos en junio de este año.

La necesidad de incorporar la perspectiva de género en el ámbito educativo, la detección y escucha frente a estudiantes adolescentes y jóvenes que solicitan ayuda o quieren comunicar situaciones de abuso que sufren con sus parejas o compañeros de escuela, todo ello requiere la comprensión del fenómeno de la violencia de genero como parte de una sociedad donde el machismo y la misoginia tienen alta incidencia en las relaciones personales. La cantidad de victimas de femicidios, violaciones y acosos diversos es suficiente prueba.

Difícil explicar en escasa hora y media a mas de cien directivos de escuelas técnicas las causas de la violencia de género y el abordaje necesario para dar respuestas adecuadas frente a estudiantes cada vez mas criticas de las relaciones de pareja. También dar cuenta de la necesidad de respetar la identidad de género y evitar tantas angustias y frustraciones cuando la autopercepción no es aceptada o comprendida en la comunidad.

Desde el Programa de Atención de Niñez, Adolescencia y Género, partícipes de la capacitación, se considera que para que el resultado de las capacitaciones sea de utilidad será necesaria su profundización, poniendo el eje del debate no tanto en los aspectos administrativos de elevación a las “vías jerárquicas”, sino en las realidades que atraviesan la vida escolar y en cómo efectuar aportes para que la formación de chicos y chicas rechace las practicas violentas y discriminatorias.

Un camino sin duda que recién comienza.