En la madrugada del sábado 11 de febrero, en las instalaciones del Hospital Ramos Mejía, un grupo de enfermeros del sector Clínica Médica recibieron agresiones y amenazas, motivo por el cual solicitaron la intervención de la Policía Federal.
Hoy por la mañana, personal de la Dirección de Condiciones de Trabajo de la Defensoría del Pueblo porteña se reunió con el cuerpo de delegados del Hospital Ramos Mejía para conocer cómo fueron los sucesos de violencia que sufrieron los enfermeros.
De acuerdo a lo conversado con los representantes sindicales, en el hospital no se están implementando las medidas de prevención correspondientes a los fines de observar y garantizar el adecuado control de las personas acompañantes y/o familiares de las pacientes que ingresar y egresan del establecimiento.
En el mismo sentido, critican la falta de presencia policial los días de semana y los fines de semana, ya que sin el control preventivo indispensable para los trabajadores la multiplicidad de casos que se presentan en el hospital potencia la peligrosidad de la situación.
Por este y otros incumplimientos laborales es que se está desarrollando un paro y asambleas por 24 horas en ese hospital, y según lo comunicado por los delegados siguen las reuniones con las áreas de salud y seguridad del Gobierno de la Ciudad.
Finalmente, la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, quedó a a disposición de los representantes sindicales y propuso continuar trabajando para mejorar las condiciones de trabajo.
