Entre los reclamos del colectivo figuran la sanción de una ley de cupo e inclusión laboral travesti y trans; la reforma judicial para poner fin a los femicidios, travesticidios, y transfemicidios; el aumento de salarios, subsidios y vacunas para trabajadoras sociocomunitarias, promotoras de género y todos los trabajadores esenciales; el cese de la violencia económica de las corporaciones; y la efectiva implementación de la ley de interrupción voluntaria del embarazo y de parto respetado.
En consonancia con esto, el área de Género de la Defensoría del Pueblo trabaja en la promoción de derechos, atención y acompañamiento a víctimas de violencia de género así como en el desarrollo de investigaciones y campañas de sensibilización. En esa línea, uno de los ejes de trabajo es el abordaje de la autonomía económica de las mujeres, condición imprescindible para la prevención de esta problemática y para que las victimas puedan salir de este tipo de situaciones.
Por otra parte, la emergencia sanitaria puso en evidencia la labor que llevan adelante las mujeres (tareas domésticas, comunitarias y de cuidado de niños, niñas, adolescentes y personas mayores) y que les impide el ingreso a empleos formales y bien remunerados y el acceso a la independencia económica.
Para evaluar el impacto de este fenómeno se llevó adelante un relevamiento sobre el uso del tiempo, el acceso al empleo y las percepciones de igualdad en mujeres y varones. La investigación “Hábitos, percepciones y realidades acerca de la desigualdad de género”, indagó acerca de los distintos aspectos que hacen a la autonomía económica de las mujeres, uno de los tres pilares para alcanzar la igualdad de género, junto a la autonomía política y la física, según la definición de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
A partir de la información recolectada, se lanzó la campaña ¿Qué vas a hacer para cambiarlo?, con el objetivo de sensibilizar a la población sobre los problemas que acarrea la desigualdad entre los géneros y la importancia de la participación como motor de cambio.
Otra de las líneas de trabajo es la capacitación continua en perspectiva de género y prevención de las violencias, en el marco de la Ley Micaela, que se desarrolla desde hace siete años, tanto para agentes de la casa como para instituciones, organizaciones sociales o personas que a título individual requieran la formación. En 2020 se capacitaron más de 3000 personas.
La Defensoría del Pueblo de la Ciudad cuenta con una línea de WhatsApp y un correo electrónico para el asesoramiento y la atención exclusiva ante situaciones de violencia de género: 11-3675-1066 y genero@defensoria.org.ar.