Queda claro que en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se observan valores elevados en lo que respecta al saneamiento, a la extensión de los servicios de agua potable y gas natural y a la conectividad.
Ahora bien, la Ciudad de Buenos Aires es la jurisdicción que tiene la menor proporción de viviendas propias en todo el territorio nacional. En ese sentido, solamente el 52% de las viviendas particulares ocupadas son propias. En comparación, a nivel nacional esa proporción es del 65%, mientras que en 10 provincias el porcentaje de viviendas propias supera el 70% (Gráfico 1).
Comparando con el Censo anterior, el Censo 2022 demuestra que el acceso a la vivienda en la Ciudad de Buenos tiene una tendencia regresiva. En los últimos 10 años, la proporción de viviendas propias se redujo un 8%.
Si observamos la distribución de viviendas propias por Comuna, queda claro que en la zona Centro, particularmente en las Comunas 1 y 3, es en donde se observa la menor proporción de viviendas propias (Gráfico 2).
La falta de planificación urbana, la escasa regulación estatal sobre los usos del suelo urbano y la ausencia de políticas públicas eficientes en términos de acceso a la vivienda, generan una enorme desigualdad en el ejercicio del derecho a la vivienda en la población. El crecimiento de los hábitats informales, el marcado proceso de inquilinización, el aumento de las viviendas ociosas y el avance de la dolarización de alojamientos transitorios, entre otros factores, configuran en su conjunto una situación de déficit habitacional crítica.
Al respecto, hace unas semanas el Gobierno de la Ciudad anunció una serie de medidas que apuntan específicamente aliviar la difícil situación habitacional de los/as inquilinos/as. Puntualmente, se impulsan acciones para incrementar la oferta de viviendas en alquiler a través de beneficios impositivos, reducción de regulaciones y la implementación de un programa de covivienda.
Sin embargo, la magnitud de la problemática habitacional no se puede resolver con medidas parciales y aisladas. Es necesario que el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ordene y regule los usos del suelo, implementando una política habitacional activa, integral y planificada que propicie una producción social del hábitat urbano más equitativa, democrática, participativa y sustentable, prestando especial atención a la inclusión de los sectores más vulnerables de la sociedad.
Gráfico 1. Tenencia de viviendas propias particulares ocupadas por jurisdicción. Total país. Año 2022 (en %)
Fuente: elaboración propia en base a INDEC (2023).
Gráfico 2. Tenencia de viviendas propias particulares ocupadas por comuna. CABA. Año 2022 (en %)
Fuente: elaboración propia en base a INDEC (2023).
Bibliografía:
INDEC, 2023. Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2022. Resultados provisionales. Indicadores de las condiciones habitacionales de las viviendas particulares ocupadas. Mayo 2023.