La consagración de esta fecha a nivel global es una iniciativa promovida desde 2005 por la Unión Internacional para el Control del Cáncer (UICC), que integra una red en más de 150 países, entre los que figura la Argentina, y brinda la oportunidad para que las autoridades sanitarias y las organizaciones de lucha contra esta enfermedad de cada país desarrollen simultáneamente acciones de sensibilización entre la población hacia una cultura preventiva: vida saludable y estudios diagnósticos tempranos.
El cáncer pertenece al grupo de las enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT), junto a las enfermedades cardiovasculares, la diabetes y las enfermedades respiratorias crónicas. Las ECNT conforman en la actualidad la principal causa de mortalidad en el mundo, y el cáncer es la segunda causa de esas defunciones.
Según datos brindados por el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica y Reporte del Cáncer (Ministerio de Salud de la Nación), en nuestro país los tumores representan la segunda causa de mortalidad (19,02%) con relación al total de muertes, precedidos por las enfermedades del sistema circulatorio (28,46%) y seguidos por enfermedades del sistema respiratorio (18,14%).
Aunque existen distintos tipos de cáncer, en nuestro país algunos se presentan con mayor frecuencia: el de mama, el colorrectal y el de pulmón.
La prevención y la detección temprana mejoran las posibilidades de tratamiento y curación.
El riesgo individual a desarrollar cáncer depende de la combinación de varios factores: la predisposición genética, el ambiente y el estilo de vida. Es en este último componente sobre el que tenemos mayor control.
Las medidas preventivas en nuestro estilo de vida son fundamentales. Evitar fumar y/o exponernos al humo del cigarrillo es una de las acciones más significativas que podemos implementar. El consumo de tabaco es el factor de riesgo evitable que causa más muertes por cáncer en todo el mundo.
También importan:
- Mantener un peso corporal saludable y adoptar una dieta sana con mayor consumo diario de frutas y verduras, disminución de las grasas de origen animal (fiambres, embutidos, manteca y leche entera) y alimentos con grasas trans (snacks, golosinas, pastelería) y/o cocinados en exceso.
- Realizar actividad física diaria, 30 minutos al día
- Evitar la exposición solar entre las 10 y las 16 hs, utilizar protectores o bloqueadores solares.
- Evitar el consumo excesivo de alcohol
- Usar preservativo en todas las relaciones sexuales para reducir la transmisión del Virus del Papiloma Humano (VPH) asociado al cáncer cuello de útero.
Los controles médicos y estudios de rutina ayudan a obtener diagnósticos tempranos: papanicolau (PAP) y mamografías en las mujeres, controles de próstata, colonoscopías y test de sangre oculta en materia fecal para los varones.
En Argentina, desde 2010 el Instituto Nacional del Cáncer dependiente del Ministerio de Salud de la Nación es el organismo que desarrolla políticas a nivel nacional para mejorar la prevención, detección temprana y control de los distintos tipos de cáncer, fomenta la investigación científica, la capacitación de los profesionales y la promoción de los Cuidados Paliativos. Cuenta con un Servicio de Orientación a la Comunidad a través del cual brinda asesoramiento gratuito, personalizado y confidencial a pacientes con cáncer, sus familiares y toda persona que desee saber sobre cuestiones relacionadas con la prevención, el diagnóstico y el tratamiento.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, existe una Red de Oncología conformada por los servicios especializados que funcionan en los hospitales generales de agudos. El Hospital de Oncología María Curie es un centro de referencia en la materia. Estos nosocomios son públicos, y por lo tanto su atención es gratuita.
El Día Mundial contra el Cáncer también es una ocasión para promover los derechos de los personas con esta enfermedad a recibir tratamiento, a ser informadas, acompañadas y a que sus decisiones sean respetadas.
En nuestro país, los tratamientos oncológicos tienen una cobertura del 100% para pacientes de hospitales públicos, para afiliados a obras sociales o asociados a empresas de medicina prepaga. El requisito es que los protocolos sean nacionales y que cuenten con la aprobación de la autoridad de aplicación.