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La Defensoría continúa participando de las relocalizaciones

A lo largo de octubre, noviembre y diciembre de este año se han realizado jornadas de relocalizaciones–mudanzas, de los barrios Villa 31, Rodrigo Bueno, Villa 20 y Playón de Chacarita.

Las mismas se encuentran enmarcadas en los Procesos de Integración Social y Urbana de los barrios mencionados. Desde 2016/2017 el gobierno porteño se encuentra interviniendo en estos cuatro barrios de la Ciudad a través de la transformación del hábitat, con la construcción de nuevos edificios con viviendas para la relocalización de aquellas familias que se encuentran sobre futuras trazas como lo son la apertura de calles, pasajes o bien por esponjamiento (demolición para otorgar aire y luz en las viviendas de una manzana). Asimismo, se espera que en los próximos meses se comience con la transformación en la infraestructura de los barrios a través del tendido de agua, cloaca y electricidad.

La Defensoría del Pueblo tiene sede en cada uno de estos barrios, a las que los vecinos pueden acceder para presentar reclamos y consultas referidos entre otros temas a las mudanzas. Entre algunas consultas que hemos registrado los días de mudanzas pudimos observar: cuestiones que tienen que ver con las demoliciones de las viviendas que se dejan o bien por la inhabilitación de las mismas, así como consultas de vecinos que aún no se mudan sobre el proceso de Integración Social y Urbana de su barrio.

En las jornadas de mudanzas estuvieron presentes la Adjuntía a cargo de Bárbara Bonelli, la Coordinación Operativa de Villas, la Coordinación Operativa de Vivienda y Hábitat y la Conducción Ejecutiva de Derechos Urbanos, Espacio Público y Medio Ambiente.

Durante las jornadas, la Defensoría observó entre otras cosas, la situación de los vecinos colindantes en cuanto a la información brindada por el órgano de aplicación del proceso de integración sobre las mudanzas de las familias linderas, los efectos que se generan producto de las demoliciones y desmantelamientos, como grietas en las paredes, rotura de caños, interrupción del servicio eléctrico y de agua, etc. Además, se observó durante el proceso de las demoliciones cuales eran las medidas de seguridad en obras, si los vecinos conocían las nuevas viviendas, si se desarrollaron talleres pre-mudanzas, el plan financiero y el modelo de escrituras, el trasladado de los bienes materiales, entre otros. Por otro lado, se recibieron consultas de vecinos y vecinas a quienes se asesoró y se les informó los días y horarios de atención de las sedes de la Defensoría en los tres barrios, para futuras consultas y reclamos.