El día viernes 14 de febrero se realizó esta reunión convocada por la Secretaría de Integración Social y Urbana del Gobierno de la Ciudad, en la que participó la Coordinación Operativa de Villas de la Defensoría, junto a la Adjuntía de Bárbara Bonelli y la Subcoordinación Operativa de Usuarios Esenciales. Asistieron también vecinos, representantes de Edenor, Edesur, Aysa y diferentes áreas de la mencionada secretaría.
El encuentro se inició con una presentación de la SISyU sobre el estado de situación previa a su intervención en el barrio en la que brindó detalles sobre el funcionamiento de red de agua informal preexistente.
Se informó además que la red cloacal está terminada y el punto de vuelco que pasa por debajo de la Plazoleta Canadá está otorgado a Aysa por convenio y por el momento están trabajando en el traspaso administrativo entre ambos organismos.
Ante la consulta de vecinos por pérdidas y caños rotos en el sector Güemes, indicaron que en la semana fueron detectadas dos grandes pérdidas entre las manzanas 16 y 13 y que se está trabajando en su reparación.
Por su parte, el equipo de la Adjuntía de Bárbara Bonelli , a partir de un informe técnico del estado de situación de los servicios realizado por la Defensoría, sugirió la posibilidad de una pérdida en el sector de lavado de micros de la empresa Flecha Bus y solicitó, además, que se informe sobre la etapabilidad de las obras, con plazos y cronograma de las mismas.
Así mismo, un vecino de la manzana 100 bis, observó que en ese sector no hay presión de agua a pesar de tratarse de una obra nueva. La SISyU explicó que la red nueva está terminada pero no el acueducto, por lo que se está utilizando aún la red vieja y en consecuencia los caños están vacíos.
Sobre el agua que abastece a los vecinos relocalizados, se informó que es potable pero de una red provisoria y se aclaró que Aysa solo supervisa las obras por contrato, pero el que garantiza la potabilidad es el Gobierno de la Ciudad tomando una muestra mensual del agua que es llevada al laboratorio para su evaluación.
Respecto del servicio eléctrico se informó sobre antecedentes, pedidos de factibilidad, plazos y proceso para abastecer de energía al barrio. El principal problema es la caída de tensión en el barrio por conexiones irregulares. Sobre el estado actual del servicio y las obras realizadas, se indicó que hay 33 cámaras colocadas en el barrio para garantizar mayor potencia para todos los vecinos. En relación a los plazos para terminar la obra, la SISyU explicó que aún no están definidos y que lo evaluarán con las empresas Edenor y Edesur.
A su vez, la comunera del sector, alertó sobre el riesgo para la salud de los enfermos electrodependientes del barrio que generan los constantes cortes de luz. Edesur explicó que la ley establece que se debe pedir formalmente su intervención en estos casos pero advirtió que si no hay medidores es difícil garantizar ese servicio por parte de la empresa.