En los encuentros se trabajó sobre la memoria histórica y las personas participantes relataron sus vivencias en diferentes espacios emblemáticos, ya que la gran mayoría vive en el mismo lugar desde que nacieron. Algunas anécdotas fueron de los años ‘50, cuando iban al corso y a la cancha en saco y corbata.
En relación a cómo se movilizan en la Ciudad, manifestaron que faltan escaleras mecánicas y ascensores en las estaciones del Subte y que hay poca disponibilidad de taxis. Además, expresaron dificultades para subir a los colectivos y cruzar calles, ya sea por falta de semáforos o por su mal funcionamiento.
